El dolor de cuello es una de las afecciones más comunes. En algunos casos, será diagnosticado como cervicalgia y su causa puede deberse a diferentes factores. En este artículo te contamos qué es la cervicalgia, síntomas y duración.
La cervicalgia es el dolor de cuello que se manifiesta en la columna cervical, es decir, en la parte alta de la espalda. Generalmente, se asocia con un trauma o envejecimiento. La causa puede ser multifactorial: mala postura, tensión en el cuello, actividades deportivas, ansiedad…
Es una dolencia muy común, que afecta aproximadamente a dos tercios de la población en algún momento de su vida. Puede extenderse a la cabeza y los brazos y también a la zona media de la espalda.
La columna vertebral se encarga de proteger la médula espinal y apoyar la cabeza a la vez que permite un buen rango de movimiento. Está formada por huesos, nervios, músculos, ligamentos y tendones estructurados para permitir que el cuello sea protector mientras se mantiene flexible. Pero esta capacidad de flexibilidad también lo hace vulnerable al daño.
Ciertos movimientos que ejercen una presión gradual o repentina y aguda sobre el cuello, pueden llegar a causar molestias. Con la cervicalgia notarás el cuello más rígido o espasmos musculares asociados, además de una disminución de movimiento y sensibilidad en los músculos.
Síntomas comunes de la cervicalgia
Los síntomas de la cervicalgia o dolor cervical varían dependiendo del alcance de la lesión. Entre los más comunes están:
- Dolor en la región del cuello.
- Rigidez y espasmos en los músculos del cuello.
- Dolor que irradia por los hombros, los brazos, los dedos y por todo el cuerpo.
- Dolor torácico o en la parte superior de la espalda.
- Entumecimiento y hormigueo en los brazos y dedos.
- Pitido en los oídos.
- Debilidad en los brazos.
- Desequilibrio, mareos y náuseas.
- Dolor de cabeza.
- Dificultad para realizar ciertos movimientos con el cuello.
- Pérdida de control del intestino o la vejiga, en casos graves.
- Síntomas neurológicos, disautonomía… en casos graves.
Por suerte, la mayoría de casos de cervicalgia sólo presentan molestias leves que pueden mejorar con tratamientos conservadores.
Como hemos indicado, el dolor de cuello es uno de los más habituales, y en el caso de la cervicalgia afecta a la zona cervical alta de la espalda. Las molestias en la espalda también son uno de los principales motivos de consulta médica. El dolor en la espalda alta puede variar dependiendo de la causa: dolor tipo mecánico, dolor inflamatorio o dolor tipo neuropático. Si quieres conocer más sobre el dolor de espalda alta:
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Causas y factores desencadenantes de la cervicalgia
Es habitual que la cervicalgia aparezca después de una mala postura, pero también un traumatismo o incluso una alteración de la visión pueden provocarla si nos hace tener una mala postura. Esto se debe a que los músculos del cuello se tensan de forma involuntaria, provocando una contractura cervical y el dolor en las vértebras cervicales.
Si se alarga en el tiempo puede provenir de una artrosis cervical o cervicoartrosis (dolor crónico por el desgaste de las vértebras), o a una hernia discal cervical (dolor agudo por presión en los discos intervertebrales).
Otras causas comunes que pueden dar lugar a la cervicalgia son las contracturas musculares y las enfermedades inflamatorias (por ejemplo, artritis reumatoide o espondilitis anquilosante). El estrés, asimismo, provoca tensión muscular y dolor en las vértebras cervicales.
Tratamientos efectivos para aliviar la cervicalgia
El tratamiento para la cervicalgia depende de la causa y los síntomas de cada paciente. La mayoría de los pacientes con cervicalgia responden bien al tratamiento no quirúrgico y conservador. Algunas de estas terapias pueden realizarse en casa y siempre bajo la supervisión previa de profesionales. Los tratamientos para la cervicalgia suelen incluir:
- Medicamentos. Analgésicos, relajantes musculares y medicamentos antiinflamatorios no esteroides que ayudan a reducir el dolor y la inflamación.
- Fisioterapia. Donde se llevarán a cabo, entre otros ejercicios, movilización para fortalecer los músculos del cuello y terapia manual. Con las sesiones individualizadas de IC Rehabilitación harás ejercicios para aliviar el dolor de cuello y espalda alta.
- Aplicación de bolsas de hielo en el área afectada durante no más de 15 minutos varias veces al día para reducir la inflamación.
- Aplicación de compresas calientes durante máximo 20 minutos para aliviar la tensión muscular.
- El uso de collarín cervical, si es necesario, limitará el movimiento del cuello.
- Estirar el cuello correctamente varias veces al día puede ayudar a reducir el dolor.
La cervicalgia normalmente desaparece después de algunas semanas de tratamientos conservadores. Si el dolor es persistente durante un periodo de tiempo más largo, recomendamos ver a tu médico para que decida si es necesario operar. Los neurocirujanos o traumatólogos especialistas de columna pueden sugerir una cirugía que reduzca las molestias en casos graves de cervicalgia.
Aunque no es posible prevenir todos los casos de cervicalgia, desde Instituto Clavel te damos algunos consejos para reducir el riesgo de padecer esta afección: evita las actividades que causen tensión en el cuello, descansa el cuello todo lo que sea posible durante las horas de trabajo, evita una mala postura durante el día y la noche, no cargues bolsas pesadas en el hombro, y ajusta la silla, mesa y ordenador a la altura de tus ojos para evitar el dolor de cuello.
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