La experiencia y los avances en innovación de los últimos años han permitido que el proceso de intervención quirúrgica de ADR mejore notablemente, convirtiéndose así en la mejor opción para aquellos pacientes con degeneración de disco lumbar y cervical.
Las prótesis que se implantan actualmente presentan alta resistencia al desgaste y tienen un comportamiento biomecánico muy similar al del disco natural. Esto nos ha permitido llevar a cabo cirugías con mayor seguridad y mejores resultados clínicos. Descubre más sobre los tipos de cirugía y el proceso quirúrgico a continuación.
TIPOS DE CIRUGÍAS ADR
Reemplazo del núcleo del disco
La sustitución del núcleo del disco no es posible en el caso de los discos cervicales debido a su tamaño y a las complicaciones y los resultados clínicos obtenidos en los diferentes estudios que se han desarrollado a lo largo de los años.
A finales de los 90 y en la primera década del 2000, salieron al mercado diferentes propuestas y diseños de sustitutos artificiales de núcleo discal lumbar.
En 2007, algunos de los médicos integrantes del Instituto Clavel participamos en un estudio multicéntrico junto con varios centros tecnológicos europeos llamado Custom Implantable Medical Devices. Pensamos que si conseguíamos diseñar una prótesis de núcleo a medida disminuiría la incidencia de extrusión y de subsidencia, problemas inherentes a este tipo de prótesis. Para ello buscamos el que podía ser el mejor material posible: un poliuretano con características muy similares al disco lumbar. Sin embargo, se encontraron dificultades significativas para su implantación y, seguramente, también se habrían encontrado limitaciones en los resultados clínicos, dado que el núcleo no es el único generador de dolor.
Por ello, y a pesar de lo atractiva que resulta la idea de la sustitución solo del núcleo del disco, en Instituto Clavel creemos que la cirugía de referencia en los casos de discopatía degenerativa lumbar y cervical es la sustitución total (o casi total) del disco con una prótesis de disco artificial.
Reemplazo total del disco
Con la sustitución total o casi total del disco conseguimos la eliminación de todos los agentes causantes de dolor: el núcleo degenerado, el anillo degenerado y fisurado, las terminaciones nerviosas sinovertebrales y el platillo degenerado.
Con esto, el resultado clínico suele ser muy satisfactorio, con un porcentaje de buen resultado superior al 95%. Además, conseguimos mantener el movimiento de la articulación.
A pesar de que muchos cirujanos siguen considerando a la artrodesis o fusión lumbar o cervical como la cirugía de elección, en el Instituto Clavel consideramos que ADR es la mejor opción en los casos de degeneración discal debido a las ventajas que presenta y a la mejora en los diseños y materiales que han tenido lugar en los últimos años.