El dolor de espalda en niños puede producirse por diferentes motivos, desde malos hábitos hasta enfermedades. Como expertos en patologías de columna, desde Instituto Clavel te explicamos cuáles son las principales causas, te ofrecemos consejos de prevención y te ayudamos a determinar cuándo es necesario acudir al médico.
La prevalencia del dolor de espalda en niños no es tan elevada como en el caso de los adultos, de hecho, antes de los 6 años es poco habitual que se produzca. A partir de los 10 años suele aumentar y con la llegada de la adolescencia, entre los 13 y los 15 años, puede superar un porcentaje del 50%. Es a partir de los 16 años cuando su frecuencia se eleva al mismo nivel que en los adultos, es decir, el 80% de ellos sufrirá al menos un episodio de dolor de espalda en su vida.
En los últimos años, este dolor se ha asociado en muchas ocasiones al peso excesivo en las mochilas escolares. Y aunque es cierto que este mal hábito puede provocar dolores de espalda a nivel cervical, dorsal o lumbar, hay muchas otras posibles causas que conviene tener en cuenta cuando un niño se queja de molestias en esta zona.
Antes de repasar cuáles son las principales, desde Instituto Clavel queremos recordarte que es fundamental no pasar por alto los dolores que puedan aparecer en esta época de su vida, ya que numerosos estudios relacionan el dolor de espalda en niños y adolescentes con la presencia de dolor de espalda en adultos.
Causas del dolor de espalda en niños
Como adelantábamos al inicio, el dolor de espalda puede estar provocado por diferentes causas, también cuando se produce en los niños. Repasamos las principales:
- Malos hábitos posturales: aunque lo más habitual es que las malas posturas pasen factura más adelante, en torno a los 30 o 40 años, también pueden ser la causa del dolor en niños, sobre todo si estas se repiten de forma reiterada.
- Falta de actividad física: llevar una vida sedentaria puede tener efectos muy negativos en la espalda. Esto es así porque los músculos de la zona y del abdomen se debilita, lo que puede favorecer la aparición del dolor.
- Sobrepeso u obesidad: el exceso de kilos sobrecarga el sistema musculoesquelético, lo que puede propiciar las molestias en la espalda, sobre todo a nivel lumbar.
- Llevar o levantar un peso excesivo: esto puede ser la mochila escolar, ya sea por su exceso de peso o por la forma de llevarla, pero también cualquier otro elemento que pese mucho y se coja de forma incorrecta.
- Traumatismos o lesiones: los golpes, las caídas o los accidentes pueden ser la causa del dolor de espalda.
- Estrés o ansiedad: un mal estado emocional puede afectar a nivel físico y producir dolor de espalda.
- Enfermedades: el dolor en esta zona del cuerpo puede ser un síntoma provocado por otra enfermedad como la escoliosis infantil, la espondilosis o, aunque es menos frecuente, algunos tipos de cáncer.
Consejos para prevenir el dolor de espalda desde pequeños
La buena noticia es que, como habrás podido comprobar, varias de las causas que producen dolor durante la espalda se pueden prevenir. Te damos varios consejos que pueden ser muy útiles para cuidar la espalda tanto a corto como a largo plazo y así evitar el dolor crónico o degenerativo.
- Cuidar la postura: mantener una buena higiene postural es fundamental para prevenir los problemas de espalda. En el caso de los niños, es especialmente importante que lo hagan en el colegio, ya que es uno de los lugares en los que más tiempo pasan. Estas son las principales pautas:
- La espalda debe estar recta y sobre el respaldo de la silla.
- Los pies apoyados en el suelo.
- Los codos sobre la mesa o el reposabrazos.
- Escribir o leer sin agacharse sobre la mesa.
- Hacer pequeños descansos entre clases para que los niños puedan levantarse y estirarse.
Aparte de esto, también es importante fomentar una buena postura al dormir, preferiblemente boca arriba o de lado. En este sentido, también es fundamental que el colchón y la almohada sean de buena calidad.
- Fomentar la actividad física: la práctica habitual de ejercicio es una de las medidas más eficaces para prevenir el dolor de espalda. Inculcar el deporte desde la infancia es clave para que se convierta en un hábito para toda la vida. Para mantenerlo en el tiempo, lo mejor es elegir aquellos que realmente le gusten y diviertan.
- Mantener un peso saludable: para conseguirlo aplicar el punto anterior será fundamental, pero también llevar una alimentación lo más saludable posible, en la que abunden las verduras y las frutas.
- Evitar que el peso de la mochila escolar supere el 10% del peso del niño y llevarla siempre colgada de los dos hombros cerca del cuerpo. Otra posibilidad es optar por las mochilas con ruedas o carritos, que liberan a la espalda del peso.
- No levantar mucho peso y en caso de hacerlo, seguir estos pasos: flexionar las piernas con la espalda recta y acercase lo máximo posible al objeto que se va a levantar.
Síntomas a observar en el dolor de espalda infantil: cuándo acudir al médico
Siempre que se produzca un dolor fuerte en la espalda sin causa aparente y que no remite, lo más recomendable es acudir al pediatra, especialmente si el niño afectado tiene menos de 10 años y se producen algunos de estos síntomas:
- Fiebre o malestar general.
- Pérdida de peso.
- Problemas al mover las extremidades, rigidez o dificultad para moverse.
- Cambios posturales o en la forma de caminar.
- Dificultad para controlar los esfínteres.
- Punzadas, entumecimiento o debilidad.
- Empieza a desarrollar una curvatura en la columna vertebral.
Asimismo, si el dolor se produce por un accidente, una lesión deportiva o, incluso, malos hábitos, también es recomendable ir al pediatra para que lo evalúen y, en caso de que sea necesario, acudir a un especialista y a rehabilitación con un fisioterapeuta. De esta forma, se podrá poner solución al problema y que no vaya a más.
En la mayoría de casos, el dolor de espalda infantil desaparece sin tratamiento y no hay complicaciones. Es importante diagnosticar las causas para poder iniciar el tratamiento adecuado cuanto antes en aquellos casos más graves. De lo contrario, es posible que el dolor de espalda se vuelva persistente o se desarrolle una complicación, como puede ser una curvatura.
En Instituto Clavel contamos con más de 20 años de experiencia en patologías de columna. Por eso, queremos recordarte que siempre estamos a vuestra disposición para asesorarte de forma personalizada. Si tienes alguna duda o necesitas más información sobre el dolor de espalda en niños, no dudes en contactar con nosotros.
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Categorías: Enfermedades de columna, Prevención, Dolor de espalda